miércoles, 29 de octubre de 2008

Sala 4: LA CIENCIA DEL SUEÑO

Cien minutos de paranoica fantasía inexplicable a la vez que lógica. Una forma magnífica de plasmar los sueños mediante el día a día de la nueva vida de un joven llamado Stéphane, que tiene una particular pelea constante con la vigilia y el sueño. Todos tenemos sueños casi cada día, los recordemos o no. Sueños que a ratos manejamos intencionalmente (o eso creemos) y a ratos perdemos el control de los mismos, tomando otras direcciones, convirtiéndose en malos sueños e incluso en pesadillas. Como bien explica el prota en la película, los sueños mezclan reminiscencias de nuestro día, pensamientos sueltos sin conexión aparente, recuerdos de todo tipo (afectivos o no), nuestros deseos, miedos, pasiones, emociones, etc…
Me gusta la historia que se cuenta, confusa y extravagante, porque muestra que a veces nuestros sueños nos confunden. Otras veces, nos ayudan a conocernos y a comprender, mediante lo incomprensible, partes de nosotros mismos. Y otras, simplemente, es nuestra mente que viaja sin ton ni son.
En fin, según mi humilde persona, una gran película fuera de lo convencional y no apta para todos los públicos, sobre todo para aquellos que no gustan de llevar al límite la imaginación. Un film lleno de imágenes fabulosas e increíbles y diálogos tan absurdos como tiernos y hermosos, en algunos momentos. Y es que soy un romántico soñador...

Titulo: La Ciencia del Sueño (La Science Des Rêves)
Director: Michel Gondry
Intérpretes: Gael García Bernal, Charlotte Gainsbourg, Alain Chabat, Miou-Miou, Emma de Caunes, Sacha Bourdo, Aurelia Petit, Pierre Vaneck
Año: 2006
País: Francia
Sinopsis: Stéphane es un joven fantasioso hasta la médula, tímido, inmaduro, sensible y creativo. Acaba de volver a Francia proveniente de México, donde vivía con su padre que ha muerto de cáncer. Atrapado en sus fantasías, que a veces le juegan malas pasadas, va haciéndose con su nueva vida, en su nuevo y frustrante trabajo, con sus nuevos y excéntricos compañeros, una madre con la que convive pero con la que apenas habla, una vecina que atrae su interés y problemas de inversión sueño-realidad que llegan al punto de no saber donde se encuentra en cada momento. Entonces aparece el amor, eso que trastorna al más trastornado y distorsiona la realidad de cualquiera. Y en distorsionar, Stéphane ya es un experto. Que si el amor es "fantástico" para cualquiera, imaginen para alguien como él.

2 comentarios:

Veronica dijo...

hola ego: felicitaciones por este otro blog !!! no podre contribuir por que soy cero cinefila pero ..pasare a mirar cada tanto si me dejas..

besos

Ego... dijo...

Gracias preciosa. Este blog no es para cinéfilos ni expertos. Solo pa mi gente, la que me lee. Recomendar cosas buenas que vi no implica nada más.
Besos